¡Vamos al Teatro!

Primera función del festival

"Sesión inaugural con matachines huamantlecos"

Por Diego Rosete Sosa

Ayer miércoles, tuvimos la hermosa oportunidad de acudir al espectáculo de apertura del FIT 22 (Festival Internacional de Títeres) en el Parque Juárez de la ciudad de Huamantla. En medio de la rigurosa (y siempre innecesaria) pompa que ameritan eventos de esta magnitud, fuimos partícipes de la algarabía de niños, jóvenes y adultos, quienes aún estando de pie –dado que no se colocaron suficientes sillas- y bajo el riesgo de lluvia –pues esta es la época pluvial en el pueblo y el evento se organizó al aire libre con una lona que quiso similar carpa- presenciaron con gusto la representación del clásico de William Shakespeare, “Romeo y Julieta”, montado con espectaculares mojigangas de 3 metros de altura manipuladas con varillas, extensiones y sujeciones al cuerpo de los actores, lo cuales llegaron desde la hermana ciudad de San Miguel de Allende, Guanajuato, para entretener a nuestros ávidos paisanos.

Queremos hacer notar que, pese a la total falta de atención y organización por parte de los involucrados en la logística y planeación del evento, pudimos llevarnos un grato sabor de boca, sensación generada por la ineludible vuelta a la infancia que implica un espectáculo escénico de primer nivel dirigido a todo tipo de público.

La tradición titiritera en México, en nuestro estado, y especialmente en el municipio de Huamanta, inicia en el año de 1835 con una serie de funciones caseras organizadas por la familia Aranda en la avenida principal de esa localidad. Posteriormente, con la unión marital de Don Antonio Rosete y Maria de la Luz Aranda, inicia una de las dinastías más importantes de Títeres en nuestro país: La Compañía Nacional de Autómatas de los Hermanos Rosete Aranda.

Sin duda, fue en manos de los hermanos Rosete Aranda (Felipe, Tomas, Leandro, Adrián y María Macedonia) cuando hubo un apogeo importantísimo en este arte, pues de ello se desprenden crónicas realizadas en periódicos de la época –estamos hablando de los años 1875 a 1914- por plumas tan famosas como la de Ignacio Manuel Altamirano o Don Manuel Gutiérrez Nájera, entre otros, llegando a representaciones ante la presencia de personajes de la talla de Don Porfirio Díaz, quien aplaudió y elogió con entusiasmo la maravillosa técnica de construcción, así como la fantástica forma en que eran manejadas las piezas en los espectáculos.

Con esta iniciativa, son varias las generaciones que trascurren, hasta el año de 1943, fecha en que toca a su fin la Compañía, cediendo los derechos de nombre al Sr. Carlos Espinal, quien continúa, junto con su familia, una línea más de las connotadas marionetas de hilos.

Así, en 8 de agosto de 1991, gracias a las aportaciones de locatarios del Huamantla, el Gobierno Municipal, impulsado en ese año por Don José Hernández Castillo y bajo el Gobierno de la Lic. Beatriz Paredes Rangel, abre sus puertas al público el Museo Nacional del Titere, espacio que concentra el acervo titeril más importante de Latinoamérica, entre documentos, fotografías y piezas museográficas invaluables, de las que destacan las figuras representativas de la colección Rosete Aranda: El Vale Coyote, El Pilluelo Dinamita, Doña Pascarrona Mastuerzo Verdegay y Panza de Res y Gayverde (Doña Pascarroncita), Doña Eufracia, Los niños de la escuela, Los Soldados de la Compañía, entre otros.

Del mismo modo, se inaugura hace 22 años el Primer Festival Internacional de Titeres Rosete Aranda, que alberga actualmente participación de grupos estatales, nacionales e internacionales. Entre los grupos que han acompañado al festival desde sus inicios, se encuentran representantes de muchísimos países, como Rusia, Alemania, Vietnam, China, Argentina, Colombia, España, Italia, Estados Unidos, entre muchos otros; se ha hecho entrega de la presea Rosete Aranda a personalidades del espectáculo como el Sr. Enrique Alonso “Cachirulo”, y más recientemente a Don Carlos Converso, Mireya Cueto y Emmanuel Márquez, personalidades todos ellos del rublo titiritero en nuestro país.

El FIT ha recibido también el reconocimiento de la UNIMA (Unión Internacional de Marionetistas) máximo órgano de representatividad en el rubro, cuya cede se encuentra actualmente en España a cargo del Sr. Miguel Arreche.