Por Jorge Esteban López García
Al parecer, se integra otro aspirante a obtener la candidatura del PRI a la Presidencia Municipal de Tlaxco. Se trata del sobrino del actual Presidente Municipal y de la nueva panista, Emilio Sánchez Rivera, quien buscó este puesto en el municipio de Apizaco sin obtenerlo.
Este joven "político" se suma a esta larga fila de candidatos a dirigir el destino de Tlaxco, para este caso, se coloca junto a Ángel Márquez Peñaloza, Gardenia Hernández y Rafael Goyri, quienes no dejan de luchar para la obtención de tan ansiado trofeo (así parece que consideran a la presidencia Municipal).
De ser cierto, entraría a Tlaxco en un mal momento, ya que actualmente la situación para la familia Rivera y Sánchez no es halagüeña. Jorge Rivera Sosa pasa por un mal momento, sus niveles de aceptación han bajado demasiado y sus declaraciones no le ayudan a elevar esta calificación. Guadalupe Sánchez Santiago tomó una decisión cuestionable, demostrando su calidad moral, su nula ideología política y su insensible forma de ver la política.
En caso de ser verdad, demostraría que comparte la ambición de su tía. Parece que piensa: Si no es acá, es allá, pero quiero el hueso a como de lugar.
No comprendo cómo puede querer a un pueblo sin luchar por el pueblo. Es decir, si quiero que algo salga adelante, lucharé por lograrlo, pase lo que pase y con lo que pueda. Pero si no he luchado para ganarlo, si sólo me he sentado a esperar sin mover un dedo, quiere decir que no lo merezco. Además, de cuándo acá tanto amor por Tlaxco.
Hay un dicho que versa: "El que a dos amos sirve, con uno queda mal." Mejor amemos Tlaxco y dejemos los intereses personales a un lado, porque el cinismo y la ambición están a la orden del día en estas elecciones.
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