Por Jorge Esteban López García
Estas elecciones destacan porque las redes sociales son las encuestas, al parecer podemos medir la intención de voto mediante el número de menciones, visualizaciones y/o reacciones. Permiten el uso de diferentes medios de comunicación, como transmisiones en vivo, videograbaciones, fotografías, diferentes imágenes que ayudan a la difusión de los candidatos.
Pero así como facilitan el diálogo, facilitan la difusión de cobardes ofensas, de chismes y de falsa información. Hay perfiles falsos, hay juicios de valor personales, hay señalamientos sin sustento, hay afirmaciones que son preocupantes, porque sólo confunden, en lugar de ayudar al buen razonamiento del voto.
A pesar de todo, este tipo de diálogo bien razonado o vulgar, nos permitirán discernir quiénes cuentan con las preferencias electorales, quiénes tienen las mejores propuestas y quiénes saben el puesto que buscan. Dicen que la gente ya no es tonta, que ya sabe elegir bien. Ojalá, aunque sigo creyendo que si se equivoca es porque juegan con su confianza.
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