04 enero 2008

Otro año...

Fue un inicio de año muy peligroso, no está por demás decirlo: Comenzamos con la pata izquierda, e incluso con las dos acariciándose una a otra para que no se congelaran. Vientos por allá, por acá; láminas volando, también techos completos de lámina de cartón; hasta el Palacio Municipal fue golpeado, las láminas del techo se rompieron y otras casas del centro todavía con techumbres a la antigua: De dos aguas, fueron afectadas.
Hay pocos damnificados, pero muchos con frío. Las casas dañadas serán atendidas por el ayuntamiento, ya se tiene detectados los hogares.
También se cortó el servicio de energía eléctrica, cerca de las once de la noche, quedando reestablecida a tempranas horas del día.
Mientras esto sucede, por los llanos de Teopan y más al norte las nevadas ya iniciaron, lo cierto es que ahora se dejó venir con más intensidad. Mucha gente venía con sus bolas de nieve, alegre y contenta, después de presenciar parte de estos fenómenos naturales.

A pesar de ello las fiestas de fin de año figuraron por fogatas, grandes sonidos, juegos pirotécnicos, alcohol y mucha comida. Los paisanos que vienen de Estados Unidos celebraron estar con su familia y comenzar el año junto con ellos. Las familias de acá celebramos el año esperando que el otro sea mejor, pues no pinta para tal, pero el mexicano nuca pierde la esperanza de que salgan bien las cosas.
Los aumentos a precios amanecieron junto con el 2008, también los pronósticos científicos del clima, donde se dice que verdaderamente hoy inicia el invierno y la temporada de sequías, lo que pone en entredicho el calendario que usamos y su precisión para medir el estaciones y prevenir los cambios climáticos.
El único que inició bien el año es Calderón y Silvestre, aunque Silvestre no muy bien, pues no le alcanza el dinero para pagar aguinaldos y sueldos que ya están muy caídos.
El próximo presidente tiene una tarea muy fuerte, además de compensar deudas del ayuntamiento, necesita levantar el Palacio. La humedad y el tiempo lo están tirando, ya se cayó parte del techo y ya lo han reparado, pero la humedad en las paredes sigue dañando la estructura. Tiene mucho qué hacer y qué preguntar.

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